El paso de una onda tropical ayer por el país provocó un aumento en las precipitaciones, en especial sobre la provincia de Limón.
Varias comunidades de Siquirres resultaron inundadas durante la madrugada y la mañana de ayer, aunque no se reportaron daños graves a las viviendas.
Entre los mayores problemas estuvo el cierre del paso al sector de La Perla, en el mismo cantón limonense, por el desbordamiento del río Siquirres.
Además, ayer eran vigilados los ríos Pacuare y Reventazón, que también estaban crecidos.
Ante esta situación, la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) emitió ayer la declaratoria de “alerta verde”, para prevenir a las personas que viven en las zonas más propensas a inundaciones.
A pesar de que ayer en la noche culminó el paso de la onda tropical por el país, se tenía previsto que la afectación del fenómeno continuara durante la madrugada y las primeras horas de la mañana de hoy, según explicó el Instituto Meteorológico Nacional (IMN).
“Ya atravesó el país el frente o eje (de la onda tropical), pero los efectos o las lluvias vienen atrás, en lo que llamamos la parte inestable. Eso se va a mantener hasta mañana (hoy) en la madrugada y el inicio de la mañana”, dijo el meteorólogo Juan Diego Naranjo.
Naranjo explicó que hoy, conforme avance el día, se retornará a las condiciones típicas de la estación lluviosa en el sector del Caribe y el resto del país.
Inundaciones en Siquirres. En Siquirres el río del mismo nombre inundó las comunidades de La Lucha, Islona, Nueva Esperanza, Imperio, Hamburgo y Matas de Costa Rica, según la CNE.
La emergencia en esas localidades pasó pronto, ya que en poco tiempo el agua volvió a su cauce.
También fue afectada La Perla, que se quedó sin paso por un desbordamiento del río.
El comité local de la CNE y la Cruz Roja de El Carmen de Siquirres se mantenían anoche vigilantes de las crecidas de los ríos Pacuare y Reventazón.
Siquirres en alerta por daño en diques de varios ríos
Estructuras de ríos Reventazón, Pacuare y Siquirres están muy debilitadas
Dirigentes locales plantean queja contra la CNE por falta de atención
Los principales diques que protegen el cantón de Siquirres de los ríos Reventazón, Pacuare y Siquirres fueron seriamente dañados por la inundaciones del pasado 25 de diciembre.
Varias comunidades de Siquirres resultaron inundadas durante la madrugada y la mañana de ayer, aunque no se reportaron daños graves a las viviendas.
Entre los mayores problemas estuvo el cierre del paso al sector de La Perla, en el mismo cantón limonense, por el desbordamiento del río Siquirres.
Además, ayer eran vigilados los ríos Pacuare y Reventazón, que también estaban crecidos.
Ante esta situación, la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) emitió ayer la declaratoria de “alerta verde”, para prevenir a las personas que viven en las zonas más propensas a inundaciones.
A pesar de que ayer en la noche culminó el paso de la onda tropical por el país, se tenía previsto que la afectación del fenómeno continuara durante la madrugada y las primeras horas de la mañana de hoy, según explicó el Instituto Meteorológico Nacional (IMN).
“Ya atravesó el país el frente o eje (de la onda tropical), pero los efectos o las lluvias vienen atrás, en lo que llamamos la parte inestable. Eso se va a mantener hasta mañana (hoy) en la madrugada y el inicio de la mañana”, dijo el meteorólogo Juan Diego Naranjo.
Naranjo explicó que hoy, conforme avance el día, se retornará a las condiciones típicas de la estación lluviosa en el sector del Caribe y el resto del país.
Inundaciones en Siquirres. En Siquirres el río del mismo nombre inundó las comunidades de La Lucha, Islona, Nueva Esperanza, Imperio, Hamburgo y Matas de Costa Rica, según la CNE.
La emergencia en esas localidades pasó pronto, ya que en poco tiempo el agua volvió a su cauce.
También fue afectada La Perla, que se quedó sin paso por un desbordamiento del río.
El comité local de la CNE y la Cruz Roja de El Carmen de Siquirres se mantenían anoche vigilantes de las crecidas de los ríos Pacuare y Reventazón.
Siquirres en alerta por daño en diques de varios ríos
Estructuras de ríos Reventazón, Pacuare y Siquirres están muy debilitadas
Dirigentes locales plantean queja contra la CNE por falta de atención
Los principales diques que protegen el cantón de Siquirres de los ríos Reventazón, Pacuare y Siquirres fueron seriamente dañados por la inundaciones del pasado 25 de diciembre.
Daños. En el caso del Reventazón, la estructura quedó lavada en tres partes. En total son unos 225 metros que fueron afectados.
Mientras tanto, el río Pacure dañó el dique cerca de la comunidad de La Lucha.
Para Guillermo Campos, presidente del comité de Cruz Roja de Carmen de Siquirres, la situación es muy preocupante, en especial por el frente frío que afecta al país.
Campos aseguró que sin los diques los vecinos solo pueden rezar y esperar que no llueva en la montaña, para que el caudal del río no aumente tanto.
En diciembre, afirma Campos, “además de la lluvia que cayó, el mayor daño fue provocado porque el Instituto Costarricense de Electricidad tuvo que abrir las compuertas de las represas de Cachí y Angostura, en Turrialba”.
Según informes recibidos por la Cruz Roja, el Instituto empezó vaciando 400 litros por segundo, pero con forme la lluvia continuó cayendo fue necesario soltar hasta 1.300 litros por segundo.
“Esto ocasionó que los diques no soportaran y todas las comunidades de la zona terminaran inundadas”, recalcó Campos.
De hecho, algunos poblados como Islona y Hamburgo son los de más alto riesgo de inundación a causa de su ubicación a orillas del río Reventazón.
A pesar de que hace más de 20 años las familias del lugar fueron reubicadas en fincas del Instituto de Desarrollo Agrario, unas 35 decidieron quedarse y cada vez que el afluente cobra fuerza son las primeras afectadas.
Mientras tanto, el río Pacure dañó el dique cerca de la comunidad de La Lucha.
Para Guillermo Campos, presidente del comité de Cruz Roja de Carmen de Siquirres, la situación es muy preocupante, en especial por el frente frío que afecta al país.
Campos aseguró que sin los diques los vecinos solo pueden rezar y esperar que no llueva en la montaña, para que el caudal del río no aumente tanto.
En diciembre, afirma Campos, “además de la lluvia que cayó, el mayor daño fue provocado porque el Instituto Costarricense de Electricidad tuvo que abrir las compuertas de las represas de Cachí y Angostura, en Turrialba”.
Según informes recibidos por la Cruz Roja, el Instituto empezó vaciando 400 litros por segundo, pero con forme la lluvia continuó cayendo fue necesario soltar hasta 1.300 litros por segundo.
“Esto ocasionó que los diques no soportaran y todas las comunidades de la zona terminaran inundadas”, recalcó Campos.
De hecho, algunos poblados como Islona y Hamburgo son los de más alto riesgo de inundación a causa de su ubicación a orillas del río Reventazón.
A pesar de que hace más de 20 años las familias del lugar fueron reubicadas en fincas del Instituto de Desarrollo Agrario, unas 35 decidieron quedarse y cada vez que el afluente cobra fuerza son las primeras afectadas.
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